Los asesores son esenciales en el mundo de los negocios, en especial para aquellos más pequeños que no pueden pagar un departamento específico a la hora de llevar todo lo que tenga que ver con la contabilidad y la fiscalidad.
También existen empresas más grandes que recurren a ellos, de forma que externalizan este tipo de servicios y evitan tener que contratar personal.
Los asesores necesitan un software que les ayude en sus tareas
En este momento, más cuando Hacienda obliga a hacer los trámites online, en todas las asesorías necesitan un software específico, de esos que, si hay dudas sobre como rellenar el modelo 036, lo haga él solo sin necesidad de buscar nada.
Automatizan tareas repetitivas
Ahora mismo no tiene sentido tener personas trabajando en tareas repetitivas, como rellenar el modelo 115 de Hacienda. Esto lo hace solo cualquier programa con los datos del cliente.
De esta manera, las personas que trabajan en las asesorías se pueden dedicar a lo que importa. Esto es atender todas las dudas de los clientes, ayudándoles a pagar lo menos posible siempre dentro de la legalidad.
Se reduce el margen de error
Cuando hablamos de temas contables y fiscales no cabe el error. No presentar a tiempo el modelo 184 de la AEAT o hacerlo con datos erróneos conlleva problemas serios, puesto que sabemos que los fallos con Hacienda siempre se traducen en multas que pueden ser muy cuantiosas.
Aquí llegan los problemas para las asesorías, puesto que las multas se envían a los clientes, que son los que firman todas las declaraciones y modelos que se presentan.
Lo normal es que exista un seguro para estos casos y sea el asesor el que pague, pero el daño reputacional es enorme. A nadie le gusta recibir una notificación de Hacienda y menos si ha hecho todas las cosas bien.
Gracias al software esto no pasa, pues no hay error posible y así se evitan muchos problemas con los clientes, que esperan que sus modelos, declaraciones, etc., no contengan errores.
Ayuda a tomar decisiones
Entre las funciones de los asesores fiscales está la toma de decisiones. Deben ayudar a sus clientes a la hora de decantarse por una u otra figura fiscal, por la manera en la que cotizan o ver si las cuentas están saneadas de cara a una expansión.
Todo eso se hace con los datos que se sacan del software para despachos contables y fiscales. Con un solo clic se puede ver cómo está la tesorería, si los ingresos crecen, qué impuestos se han pagado, etc.
La comunicación con los clientes es mejor
Siempre tiene que haber una estrecha colaboración entre los clientes y el despacho. A ello ayuda mucho un buen software.
Este crea espacios colaborativos para cada una de las empresas, de manera que estas pueden subir sus facturas, modelos, y todo lo que consideren necesario.
En ese mismo tablero, la asesoría da información sobre inspecciones, nuevas líneas de financiación, subvenciones, cambios en la normativa, etc. Así, ambos tienen un sitio en el que comunicarse sin necesidad de coincidir en el tiempo.
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